En la Batalla de Manzikert (actual Turquía), los turcos selyúcidas bajo el mando de Alp Arslan derrotan a las tropas bizantinas y capturan al Emperador Romano IV Diógenes, que es llevado ante Alp Arslán que se muestra magnánimo en la victoria y lo deja en libertad tras firmar un tratado de paz en condiciones aceptables: Romano pagará un millón de monedas y entregará Manzikert, Edesa, Manjib y Antioquía, lo que supondrá el comienzo de la caída del Imperio Bizantino al abrir las puertas de Anatolia al empuje turco y la repoblación de numerosas zonas de Asia Menor. A cambio de esto, ambos imperios permanecerán en paz. Una vez fallecido Romano IV, Alp Arslam considerará que el trato acordado por ambos tras la batalla de Manzikert, habrá caducado y se sentirá liberado para continuar atacando al Imperio Bizantino. (Hace 953 años)